En medio de un denso bosque en Izalco se esconden dos cuevas misteriosas que han despertado la curiosidad de habitantes y turistas por igual. Descubre las enigmáticas cuevas de Chanejekat.
Izalco es conocido por su historia, costumbres y tradiciones relacionadas con las comunidades indígenas y la religión católica. Tiene diversos atractivos y deliciosa gastronomía que encantan a todos aquellos que explotar este pueblo colonial.
Sin embargo, pocos o casi nadie, ha explorado a Izalco más allá de su ciudad colonial. Y es que en su casco rural también hay atractivos mágicos—místicos le llaman algunos—que dejan boquiabiertos a aquellos que se atreven a explorarlos a plenitud.
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Uno de estos lugares son las cuevas de Chanejekat, unas misteriosas cavernas que se esconden en un denso bosque y que, según sus habitantes, tienen siglos de existencia, ya que eran espacios usados por los mayas para hacer rituales o ceremonias.
Para llegar a este lugar se requiere el apoyo de un guía local. A nosotros nos acompañó don Benjamín Bautista, quien también es historiador y conoce muy bien estas cavernas.
Bautista revela que el nombre «Chanejekat» significa «ventana de los vientos» y es algo que se experimenta cuando las personas ingresan a ellas, ya que por sus grietas entra una brisa cuyo sonido eriza la piel.

«Son cuevas ancestrales de mucho conocimiento energético…Hay dos cuevas: una de las energías positivas y otras de las energías negativas. Antiguamente, se ocupaban para realizar ceremonias secretas y para el tiempo de 1932 también las ocuparon los señores que habían sido perseguidos por el ejército», comenta el guía turístico.
Don Benjamín relata que las cuevas eran muy largas, de hasta seis kilómetros, pero con el tiempo se vinieron cerrando debido a los sismos que se dan en el país.
«Siempre, al ingresar se pide permiso a los guardianes. Los bosques tienen guardianes y aquí se les conoce como chaneques. De hecho, para entrar también a las cuevas se pide un permiso», agrega.
En la cueva de energías negativas se puede sentir pesado el ambiente, incluso se encuentran objetos relacionados con la brujería como amarres. En ambas cuevas también se pueden experimentar fenómenos extraños, por ejemplo, se descargan las lámparas y los celulares se desconfiguran.

Lo más sorprendente es que al entrar en las cuevas, puedes salir por una salida ubicada a unos 100 metros de la entrada. Sin embargo, quienes las recorren aseguran que sienten como si solo hubieran caminado cinco metros. ¡Una experiencia difícil de explicar!
Si deseas hacer este tour, puedes contactarte con el guía e historiador, Benjamín Bautista, al número telefónico: 7731-8992 o seguir su página en Facebook Tour y Misterio.
