Con regularidad, las adaptaciones de libros al cine corren el riesgo de que no salga todo tan perfectamente hecho, y ejemplos de ello hay un montón; sin embargo, en esta ocasión hablaremos de una excepción que ha hecho casi todo bien y, ahora, su mayor error ha sido tratar de pasar del libro al guion, pues desde el principio se sabía que pasar una obra excepcional iba a tener muchos retos que muchas veces solo la literatura logra sortear.
Pedro Páramo, de Juan Rulfo, es un clásico de la literatura latinoamericana y una de las obras más icónicas de la literatura mexicana. Esta semana se estrenó en Netflix y ha dado mucho de que hablar entre los críticos de cine, pues, a pesar de ser el primer gran salto de Rodrigo Prieto como director, anteriormente se había dedicado a la dirección fotográfica en varias películas de renombre.
Sin dar spoiler a la película, esta trata de un drama que combina la fantasía, terror y romance; logrando transportarnos entre el pasado y el presente para ir descubriendo quién es Juan Preciado y por qué está haciendo todo lo posible por encontrarse con Pedro Páramo, en el camino vamos descubriendo todos los obstáculos que se le presentan y cómo los tiene que ir enfrentando.
La película ha logrado mostrar, tal como lo hace el libro, ese salto en las narraciones entre Pedro y Juan sin tratar de explicarnos tanto en qué momento pasa cada uno de estos saltos. Si bien en algunos momentos se vuelve un poco lenta, logra atraparnos en la historia y, si has leído el libro, podrás ir comparando muchos de los aciertos que Pietro ha dado en el filme.
Cinematográficamente hablando, la película está repleta de buena fotografía, recordemos que el director se ha especializado en ello, en cuanto a su soundtrack es un viaje musical a la época. La actuación de cada uno de sus personajes es formidable. Date un rato para disfrutar de la película y reafirma lo que pensamos nosotros