Puede faltar cualquier cosa en estas fechas, menos una cena deliciosa que nos reúne con nuestros seres queridos.
Muchas cosas son indispensables durante las fiestas navideñas, pero probablemente ninguna tan vital como la comida. Esta parte del año se caracteriza por platillos deliciosos capaces de emocionarnos de maneras que ni nosotros sabíamos que eran posibles. Tal es el impacto de la comida en estas fechas, que hay quienes esperan ansiosos todo el año para por fin degustar recetas como el tradicional pavo. Sin dejar de lado que una cena es la excusa perfecta para unir a las familias, amigos y colegas para disfrutar de un banquete con la mejor compañía.
Sin embargo, cocinar no es nada sencillo y preparar la cena perfecta para Navidad puede llegar a ser una tarea titánica que requiere de tiempo y mucha paciencia. Con los ajetreos de la vida adulta, muchas veces resulta casi imposible hacer un espacio para entrar en la cocina y preparar la cena perfecta, o simplemente la cocina no es lo nuestro. Para suerte de todos, hay quienes tienen como misión solucionar nuestro problema culinario y ofrecer banquetes de comida capaces de sacar de apuros a cualquiera.
Entre estas personas se encuentra Marcela Ríos, la propietaria y fundadora de Sugar Bakery. Tal y como el nombre de negocio lo dice, este emprendimiento comenzó como un servicio de postres donde inicialmente lo único que se ofrecía eran brownies. Sin embargo, y con el paso de 4 años, el menú de repostería fue creciendo y la necesidad de reinventarse la llevó, junto a su equipo, a buscar nuevos retos como los banquetes navideños.
Fue hace dos años que decidieron experimentar y emprender estos banquetes. La tradición en su hogar es la lasaña y con el afán de compartir lo que las ha hecho tan felices en las fiestas, tomaron a bien compartirlo con sus clientes, quienes no dudaron en darle una oportunidad a la receta.
Desde ese entonces hasta la actualidad, Marcela ha expandido este menú en el que además de las lasañas de pollo en salsa roja o blanca, han incluido lasaña de zucchini y lomitos de cerdo, los cuales han tenido el mismo gran recibimiento de parte de los clientes que han depositado su confianza en ella y su negocio para solventar la cena navideña.
Aunque el plato fuerte es la estrella de la noche y Marcela lo sabe, también es consciente que las veladas durante estas fiestas son extensas y para tener a todos contentos es necesario estar preparados. Con eso en mente, la joven emprendedora y su equipo pensaron en incluir pequeños bocadillos que abrirían el apetito de sus clientes. Asimismo, tienen a disponibilidad una gran variedad de postres y galletas especiales navideñas que sirven con detalles o regalos navideños.
De acuerdo con Marcela, diciembre es una de las temporadas más altas del año y los pedidos empiezan a realizarse a mediados de noviembre para quedar agendados con tiempo. Durante este mes, Sugar Bakery no solo debe ocuparse de los postres o las cenas del 24 y 31, sino de aquellos banquetes que serán parte de celebraciones navideñas en el área corporativa. Esto solo deja en evidencia lo demandante que el servicio de comida es a lo largo de este mes.
Así como Marcela, son muchos los emprendedores que ponen su sazón para ofrecer una cena inolvidable en vísperas de Navidad y Año Nuevo y hacer de estas celebraciones algo único y especial.