A lo largo de la historia la Luna en sus diferentes fases le regalan a todo ser vivo la oportunidad de conectarse, crecer, nacer, renacer e incluso reproducirse.
Estamos a las puertas de la presencia de dos eventos importantes que se darán en el inmenso universo, hablamos de la Luna Llena que tendrá lugar el 14 de marzo en posición cercana a Virgo y la otra será una Luna Nueva en Aries que será el 29 del mismo mes. Esto solo puede indicar una cosa, y es que el hermoso astro nocturno nos regala la oportunidad de establecer las emociones espirituales de nuestro ser. Te contamos aquí de qué van dichos acontecimientos lunares y los rituales que pueden hacer los seres humanos.
El 14 de marzo de 2025 se dará el primero de los dos eclipses, un eclipse lunar de Luna llena en el signo de Virgo. Según la astrología, este evento aportará un enfoque práctico y detallado. Esta fase nos ofrece la oportunidad de organizar nuestras vidas y poner orden en las áreas que más lo necesiten, especialmente en el ámbito emocional y práctico. Además, la energía virginiana, caracterizada por su análisis y perfeccionismo, nos ayudará a identificar lo que no está funcionando y tomar decisiones precisas para mejorar.
Por otro lado, la Luna nueva, una fase menos conocida quizás por su conexión con el recogimiento y la introspección, es un momento en que la Luna desaparece del cielo, oculta por la Tierra. Sin embargo, esta fase es de gran importancia, ya que, facilita la conexión con nuestro interior y fomenta la autoexploración.
Dos semanas después, el 29 de marzo, se perfeccionará el eclipse solar parcial de Luna nueva en Aries. Este evento, según la astróloga, traerá consigo una chispa de impulso y valentía. El eclipse solar de Luna nueva en Aries nos empujará hacia una nueva dirección, con energías explosivas que nos invitan a actuar con pasión y determinación, a tomar el control de nuestras vidas. Esta Luna nos invita a la reflexión tranquila, para permitir que lo nuevo fluya. Así, cualquier ceremonia, ritual, meditación o visualización durante esta fase puede estar vinculada con la creación de nuevos planes y el impulso de sueños por cumplir.
La Luna, nuestro astro más cercano, tiene una magia especial debido a sus diversas fases y su conexión con la noche. Esta energía no solo ha sido valorada por quienes practican sus rituales, sino que también puede ser aprovechada por todos aquellos que deseen conectarse consigo mismos a través de los ciclos lunares.
