Del 18 de julio al 11 de agosto, Mercurio entra en retrógrado y promete revolver emociones, mensajes y planes. Pero no todo está perdido: entender lo que sí y lo que no debes hacer durante este tránsito puede convertir el caos en una oportunidad para reflexionar, reorganizar y volver más fuerte.
Mercurio se enfrenta a su giro retrógrado más intenso del año, ¡y eso significa que las energías cósmicas están listas para desplegar su plan maestro! Desde el 18 de julio hasta el 11 de agosto, este tránsito te invita a revisar, pausar y volver a organizar las piezas de tu vida… pero ojo: no todo está permitido. Aquí te dejo la guía definitiva:
Lo que SÍ es recomendable hacer
- Revisión y reorganización: Ideal para revisar contratos, correos o decisiones pendientes. Momento perfecto para notar detalles olvidados.
- Regreso al pasado: La retrogradación trae oportunidades de reencontrarte con amigos, viejos proyectos o recuerdos inspiradores.
- Reflexión profunda: Una época propicia para meditar, escribir un diario o reconectar con tu intuición.
Lo que NO es recomendable hacer
- Firmar compromisos importantes: Evita contratos, compromisos laborales o viajes largos si puedes posponerlos.
- Emprendimientos impulsivos: No es el mejor tramo para arrancar proyectos nuevos—¡la energía prefiere relectura en lugar de estreno!
- Confía demasiado en la tecnología: Mensajes errados, llamadas interrumpidas o gadgets fallando: mejor prever y tener copia de seguridad.
¿Por qué ahora?
Durante este período, Mercurio —planeta que rige la comunicación, el movimiento y la mente— parece “retroceder” en el cielo, activando un ciclo de pausa. No es tiempo de acelerones, sino de pulir, corregir y reestructurar lo ya iniciado.
Tu mantra astrológico de este retrogrado
“Me detengo, integro enseñanzas, y me preparo para avanzar con poder renovado”.
No lo veas como un obstáculo, ¡sino como una oportunidad de oro para pulir cada detalle y preparar tu próxima etapa con inteligencia cósmica!
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