Antes de viajar, asegurar nuestro hogar es tan importante como hacer las maletas. Prevenir robos o accidentes nos da la tranquilidad de disfrutar plenamente el descanso. Un hogar protegido es la garantía de un regreso sin sorpresas.
Las vacaciones son ese momento del año en el que por fin podemos desconectar, cargar energías y salir a descubrir nuevos rumbos. Pero para muchos, esa ilusión también viene con un “pero”: ¿y si pasa algo en la casa mientras no estoy? Que si alguien se mete, o si hay un cortocircuito, una fuga de agua, o simplemente el susto de volver y encontrar las cosas patas arriba.
Para que no ronde por tu cabeza las preocupaciones de dejar tu casa sola, aquí te dejamos una guía práctica, con recomendaciones básicas pero claves para que tu hogar quede protegido y disfrutes tus días libres con la mente en paz.
Asegura las puertas
Parece básico, pero más de algún despistado ha salido sin cerrar todas las ventanas o sin revisar si dejó la puerta del patio bien asegurada. Antes de salir, date una vuelta por toda la casa y asegurate que todo esté cerrado. Si tenés doble cerradura, ¡usala! Y ojo: nada de dejar llaves “escondidas” bajo el tapete o en la maceta. Eso ya se lo saben todos.
Si podés instalar cerrojos extras o reforzar marcos, mucho mejor. Todo suma para que tu casa esté más protegida.
Que parezca que hay alguien
Una casa que se ve vacía es como una invitación para los amigos de lo ajeno. Por eso, una buena idea es dejar alguna luz encendida con temporizador o usar bombillos inteligentes que podás controlar desde el celular. Si tenés un vecino de confianza, pedile que recoja tu correspondencia o que le eche un ojo a la casa.
Y si tienes plantas, basura o jardín, lo ideal es dejarlo todo ordenado. Un patio limpio y sin señales de abandono hace que la casa parezca habitada.
Desconecta lo que no utilizas
Además de seguridad, hay que pensar en prevenir accidentes. Antes de salir, desconectá electrodomésticos que no vas a usar: televisor, microondas, cafeteras, etc. Así evitás sobrecargas eléctricas o posibles cortos.
Si tenés calentador de agua o aire acondicionado, ponelo en modo “vacaciones” o simplemente apagalo. También se recomienda cerrar la llave del agua si te vas por varios días, para evitar sustos por fugas o tuberías con fallas.
Tecnología que cuida por vos
Hoy en día no hace falta tener una casa de lujo para estar bien protegido. Hay cámaras de seguridad, sensores de movimiento y alarmas que podés controlar desde tu celular. Algunos dispositivos te mandan alertas en tiempo real si detectan algo raro.
Si tienes la posibilidad, colocá cámaras visibles afuera de la casa. Solo el hecho de que estén a la vista ya puede disuadir a cualquiera que ande con malas intenciones.
Apoyate en tu comunidad
No hay tecnología que supere a un buen vecino. Si vives en una colonia o residencial, avisale a alguien de confianza que vas a estar fuera. Puedes dejarle una copia de la llave por si pasa algo urgente o simplemente para que se dé una vuelta de vez en cuando.
También hay zonas donde la policía o seguridad privada ofrecen patrullajes extra si notificas con previo aviso el tiempo que estarás fuera.
Organizá tus cosas antes de salir
Otro aspecto importante es que revises todo aquello que está almacenado en el refrigerador para sacarlo y evitar que se eche a perder. Saca la basura y dejá la cocina limpia así evitarás que las cucarachas o insectos se proliferen en tu ausencia.
Si tenés cosas de mucho valor (joyas, documentos importantes, tecnología), mejor guardalas en un lugar seguro o llevatelas. También puedes tomar fotos del estado de la casa y de tus pertenencias, por si necesitás respaldo para el seguro.
Cuidado con lo que compartís en redes
Aunque cueste aguantarse, lo ideal es no publicar en tiempo real que estás de viaje. Guardate las fotos y los videos para cuando regresés. Mostrar que estás fuera puede ser un riesgo innecesario, sobre todo si tenés el perfil abierto.
Check list de último minuto
Antes de salir, tomate cinco minutos para este repaso:
- Todo cerrado (puertas, ventanas, portones).
- Electrodomésticos desenchufados.
- Agua y gas cerrados.
- Vecino avisado y con llave, si es posible.
- Luces programadas o encendidas estratégicamente.
- Cámara o alarma activadas.
- Nada publicado en redes (aún).
- Revisión rápida y video del estado de la casa.
Con estos pasos sencillos, vas a poder subirte al bus, al avión o al carro con una gran tranquilidad. Porque viajar no es solo irte lejos, también es saber que dejás todo en orden. Y cuando regresés, tu hogar te va a estar esperando tal y como lo dejaste: en calma, seguro y listo para recibirte.