Aunque en conjunto nos ofrezcan un panorama más amplio de lo que estamos pasando, cada carta que conforma el Tarot tiene un mensaje específico para cada uno.
Las 78 cartas del Tarot ponen ante los ojos de quienes deciden darles una oportunidad una infinidad de caminos, opciones y decisiones. Cada una de ellas tiene su propio significado que pueden llegar a reflejar el estado de ánimo actual de la persona que las consulta, situaciones pasadas y las puertas que se cierran y se abren en el futuro.
Lejos de lo que muchos creen, el Tarot realmente no es una herramienta para la adivinación, sin embargo, si nos ayuda por medio de un consejo. Para poder entender mejor la ciencia detrás de esta práctica es importante entender la anatomía de un mazo de Tarot.
Los triunfos o Arcanos Mayores
Estas 22 cartas conforman los pilares del Tarot. Empezando por El Loco, el cuál no posee ningún número en la parte superior de la carta, pasando por El Mago con el número uno, hasta llegar al número veintiuno que pertenece a El Mundo.
Pero, ¿qué las hace tan especiales? De acuerdo con el psiquiatra Carl Jung, estas cartas son el reflejo del viaje que cada uno de nosotros emprende durante nuestra vida, todos nuestros triunfos, pero también los fracasos. Los Arcanos Mayores están dirigidos al trabajo interno de cada uno y funcionan como herramienta para comprender mejor las emociones que nos pasan por el cuerpo.
Arcanos Menores: Valores y Figuras
Ahora bien, ¿qué hay de las 56 cartas que quedan en el mazo? Son conocidas como Arcanos Menores divididos en Valores y Figuras. Probablemente la forma más fácil de ejemplificar la estructura de estas cartas sea por medio del póker. Similar al tradicional juego de cartas, este grupo está dividido en cuatro palos: Espadas, Copas, Bastos y Oros.
Numeradas del As hasta el 10, para luego seguir con el Paje, Caballero, Reina y Rey. Las diez primeras cartas son conocidas como Valores y representan la experiencia y madurez, así como aliados u obstáculos. Por otro lado, las últimas cuatro cartas conocidas como Figuras nos ayudan a saber hacia dónde dirigirnos, identificar bloqueos y encontrar soluciones.
Aunque cada una de las cartas que conforman el Tarot tienen su propio significado, en conjunto nos ofrecen un vistazo más amplio de nuestro estado o la situación en la que nos encontramos a la hora de consultarlas y nos ayudan a tomar decisiones.