Para aquellos amantes del arte, la historia y la arquitectura, las iglesias se han vuelto en lugares infaltables para explorar y hacer una nueva clase de turismo.
Indudablemente las iglesias católicas son lugares llamativos. No solo por su arquitectura, la cual cuida cada uno de los detalles al exterior e interior de su fachada, sino también por todas las historias que guardan. Ahora bien, es importante comprender que aunque estos lugares nos abren las puertas para que podamos explorar y conocerlos, estos siguen siendo sagrados y por ende merecen el debido respeto siguiendo los respectivos protocolos que nos indiquen.
El interés por estos lugares siempre ha estado presente y es por ello que cada vez más iglesias se suman a la iniciativa de ofrecer tours guiados por sus instalaciones. Esta decisión tiene dos funciones importantes para las iglesias. La primera de carácter cultural, difundiendo su historia y datos importantes sobre las construcción del templo y su arquitectura. Por otro lado, está el ámbito económico. Normalmente, estas visitas tienen un costo simbólico que está destinado para obras de la iglesia o para contribuir a la pastoral juvenil de la iglesia, transformando ese dinero en retiros espirituales u obras como visitas a asilos u orfanatos.
Para el caso de la parroquia El Calvario, el costo de este tour es de un dólar por persona, el cual cubre el recorrido al interior del templo donde un guía realiza la explicación de las distintas partes de la iglesia incluyendo los diferentes altares, las esculturas de las estaciones del vía crucis y demás elementos. Para finalmente llegar a los campanarios de la iglesia, donde también es posible apreciar el sistema de campanas con el que cuenta. Dichos recorridos están a cargo de la pastoral juvenil de la parroquia y son realizados el primer fin de semana del mes.
Al igual que la parroquia El Calvario, la Catedral de Santa Ana es otra iglesia que ha abierto sus puertas a aquellas personas que están interesados en conocerla y hacer un turismo diferente.