Cambiar nuestra vida no es fácil, se requiere de valor para dar el primer paso y emprender un viaje que probablemente no sea en línea recta; pero que, sin duda, nos llenará de satisfacción cuando logremos las metas que nos hemos trazado.
Durante todas las ediciones de Enero hemos querido traerte una amplia lista de recomendaciones para mejorar ciertas áreas de tu vida apoyados, por supuesto, de profesionales en cada uno de los temas que hemos querido abarcar. En esta ocasión nos centramos en el físico, pero no como algo meramente estético, sino en la salud de nuestro cuerpo mediante la alimentación y la actividad física. Suena trillado y lo sabemos, pero la verdad es que no podemos gozar de un bienestar íntegro sin tomar en cuenta estos factores.
Cada área de nuestra vida se encuentra conectada y cada decisión que tomamos pensando en cambiar algún aspecto de esta afecta los demás ámbitos. Si pensamos todo el tiempo que cambiar nuestra alimentación y hacer ejercicio es un sacrificio, realizar estas actividades será cada vez más difícil. Algunos dicen que todo es cuestión de actitud, pero nosotros pensamos más bien que todo es cuestión de encontrar esas cosas que nos hacen felices y disfrutamos al mismo tiempo que le hacemos un bien a nuestro cuerpo.
Este no es un proceso de la noche a la mañana, pero los pequeños cambios nos llevan a grandes resultados. Basta con empezar a ponerle más vegetales a tu plato o buscar una rutina de ejercicios en internet que se acople al tiempo que tienes disponible. El gran reto acá es ir convirtiendo esos pequeños cambios en hábitos. Los primeros pasos no son sencillos, pero entre más te esfuerces y los incorpores en tu rutina diaria, todo se volverá un poco más fácil.
En esta última edición de Enero queremos demostrarte que no necesitas vaciar tu cartera comprando suplementos costosos para cambiar tu dieta o complicarte la vida haciendo ejercicios que no te gustan y sentir que haces un sacrificio cada vez que te ejercitas. Estos nuevos hábitos implican cambios, pero eso no significa que se vuelvan tortuosos haciendo que los abandones a las pocas semanas. La clave es buscar alimentos sanos que te gusten o hacer una actividad física que te motive. No hay nada escrito en piedra y cada persona es diferente, lo importante es que encuentres algo que te haga sentir bien mientras haces un gran cambio en tu vida. No olvides que todo paso, por pequeño que parezca, es una gran contribución para convertirte en la mejor versión de ti mismo.