Tener una rutina de belleza es imprescindible para conservar una piel lozana y radiante. Pero además es muy importante utilizar los adecuados para tu edad y tipo de piel. Conoce de cuáles se trata.
Cada cuerpo es diferente y con ello, los tipos de piel. Por tanto, no puedes pretender que la rutina de belleza que más le funciona a tu mejor amiga, sea precisamente la que te convenga a ti.
Para poder lucir una tez tersa y luminosa, el primer paso importante es mantenerte hidratada y cuidar la ingesta saludable de tus alimentos. Segundo, que nunca te falte el bloqueador solar, así no salgas de casa.
Dicho esto, te brindamos algunos consejitos útiles para que tengas una rutina de skin care efectiva, tanto de día como de noche. Establecer un horario para tus rutinas, puede ser de gran ayuda.
Rutina para el día
1. Limpia tu rostro
Lava tu rostro suavemente de preferencia con agua fría o al tiempo. Para hacerlo, usa un jabón limpiador de PH neutro. Si padeces de acné, evita los que sean enriquecidos u oleosos, mejor opta por los naturales de azufre o miel; es decir, que tengan propiedades cicatrizantes y prevengan la obstrucción de los poros.
Recuerda destinar una toalla que siempre esté limpia, exclusivamente para secar tu rostro. Y cuando lo hagas, no frotes tu piel, sécala con toquecitos.
2. Hidrata y tonifica
Luego de bañarte, hidrata tu piel con un gel o crema de acuerdo con las necesidades de tu rostro. Algunas tienen componentes como vitamina E, vitamina C, aloe vera, colágeno, ácido hialurónico, entre otros. Y, por supuesto, no olvides el contorno de tus ojos, para prevenir los signos tempranos de envejecimiento.
3. Aplica protector solar
Protege tu piel contra los rayos UV y evita así la irritación de tu rostro. Ahora el mercado ofrece una amplia variedad (con o sin color) y puedes optar por el que mejor se adecúe a tus necesidades, eso sí, de preferencia los de textura fluida y absorción rápida con SFP entre 20+ y 50+.
Rutina para la noche
1. Desmaquilla tu rostro, ¡sin falta!
El maquillaje resalta la belleza de tu rostro, pero si lo usas, es importante que no olvides retirarlo. No comentas el error de dormirte sin desmaquillarte, ya que al hacerlo contribuyes al envejecimiento prematuro y a que los poros se obstruyan. Esto puede desencadenar otros problemas de salud, como la aparición de manchas, alergias y acné.
Para hacerlo, utiliza algodón con agua micelar o bifásica y limpia con suavidad tu piel. También puedes usar toallitas desmaquillantes hipoalergénicas, sin olor.
2. Lava tu rostro
Retirar las impurezas no es suficiente, para garantizar una limpieza completa utiliza un jabón que genere suficiente espuma y que sea amigable a tu piel. En este paso, si enjuagas tu piel con agua tibia, ayudarás a que tus poros se abran y previene la aparición de puntos negros. Te daremos un secreto, luego, para cerrarlos, puedes frotar un algodón con agua fría.
Finalmente, elimina cualquier otro residuo con un tónico facial.
3. Humecta antes de irte a dormir
El uso de sueros enriquecidos con vitamina C son fenomenales, contribuyen a la elasticidad y sustentan la regeneración nocturna. Es un antioxidante que ilumina y ayuda a neutralizar el daño de los radicales libres.
Consejo adicional, asegúrate de siempre tener la funda da tu almohada limpia, así permanecerá libre de sudor y bacterias.