Si bien no podemos hacer que el planeta se detenga, es importante que encuentres un espacio para ti en el que el tiempo se pause y puedas recuperarte física y emocionalmente.
Entre tanto caos y problemas que resolver, es posible que descuidemos nuestra salud física y emocional. Es por ello que es importante que tomes un respiro y busques alternativas que se adapten a tu estilo de vida y te sirvan para descargar emociones y hacer un espacio para ti.
Para suerte de todos, la salud emocional ha sido traída a la mesa y ahora que somos conscientes de su importancia, conocemos algunas actividades que sirven para canalizar el manojo de emociones al que nos enfrentamos para transformarlo y cargar con menos peso día a día.
Escribir para soltar
¿Cuántos de nosotros no tuvimos un diario secreto en nuestra adolescencia? Ese cuaderno que guardaba nuestros más grandes secretos. Probablemente recuerdes la rutina: alistarte para ir a la cama y, en la comodidad de tu cuarto, sacar tu diario y describir con detalle tu día y cómo te sentiste.
Por increíble que suene, ese ejercicio que realizabas en la soledad de tu cuarto es ahora conocido como journaling, y al igual que en tu adolescencia, consiste en tomarse un momento del día para escribir básicamente una bitácora de nuestras emociones. Esta práctica también nos ofrece un espacio para plasmar por escrito nuestros deseos y aspiraciones que nos sirvan como recordatorio hacia donde queremos ir, es por ello que el journaling también está ligado a la manifestación.
Meditación para el cuerpo y la mente
Aunque la meditación no sea una tarea fácil para muchos, los beneficios que trae consigo son indiscutibles. Ya sea si buscas bajar tus niveles de estrés o quieras mejorar tus niveles de concentración para rendir mejor en las actividades diarias, la meditación es una gran herramienta para estos casos. Existen diferente métodos que estamos seguros que alguno de ellos se adaptará a tus necesidades.
Si bien la mayoría de sus beneficios se asocian a la salud y el bienestar emocional, no podemos negar que esto a su vez conlleva a nuestra salud física, evitando que el estrés, la ansiedad y las emociones fuertes desencadenen en males físicos. Esta práctica además, nos llama a la introspección y la autoevaluación.
Ser conscientes de nuestro espacio
Si bien escribir y meditar son excelentes formas de conectar con nosotros mismos, el mantenernos en movimiento también es una gran forma de ser conscientes de nosotros mismos y de nuestro espacio. Es por ello que el yoga es una de las grandes herramientas para limpiar nuestra mente.
Desde beneficios físicos como la mejora en la presión arterial y digestión, hasta bajar los niveles de estrés y mejorar la coordinación y concentración, el yoga es una práctica para desconectarse de la rutina, además de servir también como ejercicio lo que nos ayuda a mantenernos saludables. Existen distintos ejercicios con diferentes niveles de dificultad que te ayudarán a ir trabajando progresivamente en ti.
Recuerda que lo importante es ser consistente y hacer de estas prácticas un hábito para mejorar tu día a día.